jueves, 17 de enero de 2008

PERRO MUERTO O "NUNCA MAS QUERIDO OXIMORON"

¡Y bien! Lo sé, este espacio ha estado carente de atención y (por que no decirlo) de cariño…tener un blog es complicado, mantenerlo es complicado…es como cuando uno es chico y le regalan una mascota ¿se entiende? Cuando te dicen “pero hay que darle de comer TODOS los días, ponerle agua, sacarlo a pasear y tienes que hacerte responsable de él”. Es prácticamente lo mismo, comenzar con un blog es fascinante y entretenido, pero no basta con crearlo, hay que mantenerlo, reinventarlo cuando es necesario, hay que seguirlo…y me parece esa es la parte en la que Don Cayetano y yo hemos fallado.

O sea que si el blog fuera algo como un perrito y cayera en nuestras manos supongo que jugaríamos mucho con él al comienzo, pero a estas alturas nuestro perrito menos que perrito sería un cadáver de perrito. Un difunto. Un occiso. Un fiambre de perrito.

Lo bueno es que el blog es que (…a diferencia del perrito…) se puede retomar siempre que uno quiera, pedirle disculpas, sacudirle el polvo, ponerlo bonito, jugar con él de nuevo y prometerle que nunca más.

Mi querido oximoron…nunca más.

Temo que se piense que por tener abandonado este sitio no tenemos nada que decir, ni nada que contar, ni nada que opinar cuando en realidad no es así, si hay algo que a Don Cayetano Delaura y a mí nos sobran son las historias, las ganas, las opiniones, las palabras, los chascarros, las pataletas y las declaraciones…lo que no nos sobra es el tiempo.


Nunca más mi querido oximoron…nunca más.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Sierva María:
¿Existen los "Nunca más"?, ¿Valen?.
Este caballero cree que existen y lo que vale es persistir en la lucha contra uno de los mayores enemigos del crecimiento: la morosidad, que no se advierte tanto como otros peligros más vistosos (la controversia, el desaliento, el desacuerdo).
Así las cosas.. ¿Nunca más...?

Por supuesto, este amor está plagado de esos procesos tan humanos como divinos como son la tenacidad, el renacimiento y el reencantamiento.
Sí, nunca más nuestro querido Oximoron...nunca más.

Suyo.
Don Cayetano Delaura